BUSCANDO ALGUIEN PARA AMAR
El director inglés Mike
Leigh, habituado a contar historias sobre la sociedad inglesas, sobre todo a
las clases medias y obreras, en donde los conflictos familiares se
encuentran presentes, teniendo su mejor exponente en su film Secretos y Mentiras (1996), sus
historias son contadas de manera seca, con una mirada objetiva sobre lo que
ocurre sobre los personajes, sin tratar de realizar juicio de valor, tal como
ocurrió en Vera Drake (2004), en la
cual nos cuenta la historia de una mujer que realiza abortos, mostrándonos su
día a día de una manera cotidiana, sin satanizar ni justificar sus acciones.
En Another Year, nos encontramos en Londres, teniendo como
protagonistas a un matrimonio, integrado por Gerry (Ruth Sheen), que es una terapeuta en un
centro hospitalario y por su esposo Tom (Jim Broadbent) es un geólogo. En la
primera escena vemos a una paciente que sufre de insomnio interpretada por Imelda
Staunton (que gran actriz), quien transmite una tristeza y furia que logra
conmover con su breve aparición, dicha aparición marca la pauta de lo que se
nos contará más adelante, en donde la soledad y tristeza, se contrasta con la
vida de los protagonistas, que son una pareja feliz, que tiene como única preocupación
que su hijo Joe consiga casarse.
Su director, nos van presentados
a los demás personajes que conforman este retrato de la clase media baja, imbuidos
por la soledad y la tristeza, en donde tenemos a Ken, un viejo compañero de la
universidad de Tom y Gerry; Mary amiga
de trabajo de Gerry; Joe hijo de Gerry y Tom; Ronnie hermano de Tom; Carl hijo
de Ronnie, y además de Katie, en donde cada personaje tendrá un papel
importante en la historia.
La historia es divida en
cuatro partes, que representan las estaciones del año, la película narrativamente
es contada de manera lineal, en donde cada episodio nos cuenta un hecho en
particular, en el primero (primavera) en el cual aparece Mary, en donde se
aprecia la soledad en que se ve sumergida, pero de una manera sutil, en una búsqueda
de llenar el vacío en su vida. En el segundo episodio (Verano) tenemos a Ken
que pasa unos días con sus amigos, no pudiendo ocultar la depresión en que se
encuentra, la fiesta del nacimiento del hijo de Janet; en el tercer episodio
(Otoño) la aparición de Katie, que será un factor desencadenante para el
desborde de un personaje y; en el capítulo final (Invierno), nos encontramos en
el funeral de la cuñada de Tom, en cual
aparecen Ronnie y Carl, esposo e hijo, respectivamente.
Si bien, se podría hablar
que los personajes de Gerry y Tom, son los protagonistas de la historia, ya que
es alrededor de ellos en que los demás personajes van y entran en sus vidas,
pero la pareja son simples espectadores de la desilusión y depresión de los
otros personajes. Ellos no tienen mayor intervención en sus vidas, los
problemas de los demás no alteran su día a día, teniendo una manera neutral
ante los acontecimientos que ocurre, pero en un momento parece que esa
neutralidad se rompe por parte de Tom, pero que Gerry interviene para poner las
cosas en su cauce normal.
Los filmes de Leigh, se
encuentran centrados en las actuaciones, el peso de la historia recae en los
actores, en donde los rostros, movimientos de los cuerpos,
las inflexiones en las palabras, resultan determinantes para
mostrarnos lo que ocurre en el interior de cada personaje, Leigh con
gran maestría y pulso, la verdadera historia es la que no se ve a
simple vista, los espectadores somos receptores de los sentimientos y
conflictos que desbordan la pantalla. El personaje de Mary (Lesley Manville)
va adquiriendo más fuerza e importancia en la historia, es la que va
envolviendo a los espectadores con su desilusión, con una escena final que es devastadora.
El último film de Leigh es uno de los mejores de su filmografía.